Sudeste Asiático 2011
2011 fue un año lleno de viajes porque volvimos de Argentina en Febrero, hicimos temporada y en Octubre ya nos estábamos yendo al sudeste asiático por 4 meses. No teníamos billete de vuelta porque no sabíamos desde que país íbamos a volver. Recorrimos Tailandia de arriba a abajo, Laos, el norte, Vietnam entero y Camboya. Todo en un recorrido circular. También pasamos unos días en Hong Kong haciendo escala antes de volver a España. Todo lo hicimos en «local bus», nada de buses turísticos ni aviones internos. Y es que en los autobuses es donde más hemos flipado. En Vietnam entran las vendedoras de pan en el autobús mientras espera en la estación a que esté lleno y salir, estas te ponen la barra de pan, de verdad no exagero, a 5 cm de tu cara. Tu las miras y les dices que no cordialmente pero ellas siguen de pie a tu lado con la barra de pan tan cerca de tu cara que le puedes dar un bocado o te pueden sacar un ojo. Pasan los minutos y ellas siguen ahí inmóviles. Hemos visto a otros vietnamitas desistir y terminar comprándoles la barra de pan. Si están cansados y necesitan usar un hombro donde echar una cabezadita no dudarán en hacerlo sobre el tuyo. Y por si fuera poco tirarse un pedo o sacar la flema desde las entrañas más profundas y escupirla delante de ti es costumbre habitual. También ponen karaoke en una pantalla y el volumen tan alto que olvídate de usar tapones, terminarás aprendiéndote la letra de la canción en lengua jemer.
En las islas o en algunos pueblos alquilábamos scooters por 4 dólares al día y explorábamos los alrededores. Tailandia es el mejor país como primera inmersión en Asia: está hecho para mochileros. Tienes todo lo que necesitas, el choque cultural no es tan fuerte, es divertido, baratísimo, la comida deliciosa, la fruta riquísima y el clima ideal. Es cierto que hay zonas demasiado explotadas y llenas de viejos puteros o mochileros borrachos, pero es cuestión de evitarlas. Después el paso a Laos es muy especial porque es un país más tranquilo, menos explotado y muy bonito. Vietnam es más heavy y no hay viajero que no se haya liado a discutir a gritos con algún local porque a cada paso que das intentan estafarte y liarte como ninguno. Nosotros nos bajamos de un autobús indignados porque nos querían cobrar extra por la mochila. A nadie más le cobraron extra por llevar sacos de arroz (nos fijamos en cuanto pagaba la gente a propósito para darle el dinero justo. Sí, hay que andar con mil ojos y copiar a los locales sino eres un corderito entre lobos). De Vietnam cruzamos a Camboya, que vuelve a ser muy tranquilo y bonito. Luego Tailandia, donde te sientes como en casa porque ya vienes espabilado de los otros países, hay super mercados y buenas carreteras.
Historias, anécdotas, curiosidades…:
-nos robaron el pasaporte y algo de dinero, imaginaos el lío para hacer un pasaporte italiano de un argentino en Bangkok.
-no nos pusimos enfermos nunca, apenas alguna diarrea ocasional
-conocimos una pareja de argentinos que no sólo han resultados ser de nuestros mejores amigos sino la mejor pareja para viajar
-los templos de Angkor Wat cerraban a las 17:30, pero el sol no se iba hasta las 18:30 así que en esa hora íbamos rápido en bicis y nos daba tiempo visitar algún que otro templo o ver monos, además ya no había turistas ni vendedores.
-en estos países no suele existir la burbuja de espacio personal que tenemos en Europa. Es normal tenerlos MUY cerca en el tren o autobús
-no se como, siempre acabábamos en sitios donde éramos los único turistas, a veces se agradecía pero otras te sentías un bicho raro porque te miran y te señalan…incluso te llaman «falang» (como nosotros llamamos «guiris» a los ingleses que llevan calcetines con las chanclas)
Aquí hay fotos de algunas veces que alquilamos moto
- viaje por Vietnam en moto